Un verdadero drama viven los familiares de Francisco Javier Lobato Barrera, de 33 años, quien resultó ahogado en la mañana del domingo en el sector de Puerto Mocho cuando observaba un buque que transitaba por el Río Magdalena, y desde ese entonces su cuerpo no ha aparecido.

A las 5 de la madrugada de ayer domingo, Francisco y su esposa Durlys García salieron del barrio Villa del Carmen junto con sus 8 hijos para disfrutar de un día de mar, pero seis horas después, a las 11 de la mañana, una tragedia cambiaría sus vidas para siempre: "Se ahogó Francisco en el Río Magdalena".

Un grupo de familiares y pescadores en compañía de las autoridades desde ese entonces se encuentran en el sector realizando la búsqueda del cuerpo.

"Han pasado más de 24 horas y desafortunadamente no lo hemos podido localizar", dijeron sus familiares.

Sebastián, uno de sus 8 hijos, tiene aún intactos los momentos en que su padre cayó al río, y se sumergió entre las caudalosas aguas.

"Mi papá cargo en los hombros a la reina (su hermana de 3 años) para que viera el barco, después la bajó y se resbaló en una piedra y cayó al agua", fueron las palabras de su hijo de 6 años y quien presenció los angustiosos momentos en el que su padre se ahogaba.

Nayibis Barrera, madre de Francisco, dijo que su nuera la llamó a las 11 de la mañana para contarle la trágica noticia.

"Durlys me llamó a decirme que Francisco se había caído al Río Magdalena, cuando estaba viendo un buque que pasaba por el canal del puerto", contó la madre de la víctima.

Pese a la ayuda que brindó un mototaxista para sacarlo del río, la corriente fue más fuerte que lo sumergió.

"Un mototaxista que observó como Francisco alzaba las manos para pedir ayuda se lanzó al río para sacarlo, pero desafortunadamente no pudo lograrlo y la corriente ganó la batalla que lo terminó hundiendo en el agua", relató Nayibis.

Sus familiares contaron que Francisco Javier estuvo tomando el sábado por la noche y en la madrugada se fue para el mar con su familia, pero no creen que por culpa de los tragos pudo haber caído al Río Magdalena, sino fue causado por un accidente.

Francisco Javier Lobato residía en la carrera 1E con calle 37E del barrio Villa del Carmen y trabajaba como maestro de obras (albañil). Era el mayor de tres hermanos.

Los familiares esperan que aparezca el cuerpo sin vida de Francisco Javier para darle cristiana sepultura.